domingo, 20 de marzo de 2011

redacio de nadal

María es una niña a la que le encanta la Navidad. Es una chica ambable, pero su hermano, que era mayor y no creía en la Navidad, decía que sus padres eran lo Reyes Magos, pero no estaba en lo cierto. Un día, María se puso a decorar el árbol y a hacer sus cartas de Navidad. María escribió en la carta de Navidad: Queridos Reyes Magos, este año me gustaría, si no es mucho pedir, una Barbie y un traje de princesa y la ilusión de mi hermano ya que no cree en vosotros, me gustaría que le volviese la ilusión. Bueno hasta luego, un beso, María.

Pero lo que escribió su hermano no era así: Mamá, papá, quiero que me traigáis: un perro, la wii, un coche teledirigido y 20 juegos de construcción. Esta es mi carta, Teo.

La noche del 5 de enero, María se fue a su casa rápidamente para luego levantarse pronto para ver sus regalos. Pero Teo se puso en el sofá para quedarse más tiempo. Eran las 12:00 y alguien entraba por la puerta de delante. Teo, rápidamente, se escondíó detrás del sofá. ¡Eran los 3 Reyes Magos! estaban poniendo los regalos a cada uno. En cuanto Melchor oyó algo y miró detrás del sofá, allí estaba Teo. Baltasar dijo: yo tengo algo para tí. Teo se quedó con la boca abierta toda la noche hasta que vino María, despertada por el ruido y le dijo que creyendo en los Reyes Magos siempre irán a verte y así pasaron los años y siguió creyendo en ellos.

Arantxa pellejero de jesús

Danza kuduro Alvin y las ardillas.